La metodología de enseñanza se fundamenta en un aprendizaje colaborativo y desde el error; para Vigostky (1988) (citado por  Cid, Diana 2012), el docente como los estudiantes son mutuamente un apoyo para comprender las situaciones problema que se presentan en el aula de clase, lo que llamó “Zona de desarrollo próximo”; esto permite generar un grado de confianza en el estudiante, posibilitando un avance en el afianzamiento de los contenidos conceptuales sin reprobación, dejando de lado el miedo a equivocarse.

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Los proyectos de investigación y practicas investigativas se fundamentan en el aprendizaje basado en proyectos, (ABPr), para Fallik, Brian et al., (2008)(citado por Rodríguez, Vargas, y Cortés,  2010), éste se enfoca en el desarrollo de las siguientes habilidades: formular preguntas de investigación, proponer problemas, escoger una pregunta dirigida, escribir una propuesta, afrontar una evaluación de un par, desarrollar criterios de evaluación, métodos de investigación y desarrollo, analizar y registrar datos y por último establecer conclusiones; partiendo del enfoque ABPr, los proyectos se direccionan en tres líneas de investigación las cuales son: Matemática y  arte como la mezcla perfecta del conocimiento, Matemática aplicada a saberes específicos y Nuestro entorno desde una perspectiva matemática.

Las temáticas parten de los intereses de los educandos buscando la aplicación y la relación con las proyecciones educativas que ellos tienen, sin dejar de lado la conceptualización y aprendizaje de la matemática en todos sus campos, en la actualidad existen proyectos de diseño gráfico, geografía, geometría, física, entre otros.